Porfavor, no junte peras con frutillas

Un momento groupie de aquellos

Mi rollo con Fuguet es extraño, empezó hace como 7 años atrás, en primero medio, cuando me hicieron leer Sobredosis, libro que por cierto me cargó, lo encontré tan facho y arrogante que lo odié (años más tarde le encontraría más sentido) luego me topé con Porfavor, Rebobinar , libro que me marcó (por algo sale en el blog) en realidad no se realmente que fue lo que especificamente me hizo, mi recuerdo más claro es lo enagenada que quedé durante una semana, me sentía drogada y poseída por un historia que no me pertenecía, pero si me hacia sentir que no estaba tan sola en el mundo, recuerdo también que me advirtieron lo que me podía pasar, la Lichy me dijo: "te lo presto, pero con la condición que cuando lo termines me digas exactamente que fue lo que te hizo sentir" y ahi fue cuando me enamoré de Fuguet y con lo maniática sicópata que soy cuando algo me obsesiona, me leí todos los libros que pude encontrar en el bibliometro o en las casas de mis amigas; por eso es que amo el City Hotel que está en el centro, y me gusta tanto mirar a la gente en la micro, es esa cosa que me hizo un clic dentro y me dijo que tenía que empezar a mirar distinto todo. En cierta manera tiene un gran factor que estudie Comunicación Audiovisual y no Periodismo (aunque igual pretendo hacerlo), sus libros eran demasiado visuales y como él mismo dijo hoy, sabía que iba a terminar haciendo películas.

Hoy lo volví a ver en persona, la otra vez fui a una charla que hizo en el metro, antes que se estrenara "Se Arrienda", que por cierto no me gustó mucho, pero ese es otro rollo. Hoy hice lo que siempre dije que no haría, le pedí un autografo, me sentí patética y pendeja, pero no podía evitarlo, Fuguet fue parte de mi vida y según mis pensamientos cursis "había que cerrar un ciclo", ya lo superé para ser honesta, pero creo que es difícil volver a sentir ese enajenamiento denuevo. Más encima la muy gil de yo le digo "me he leído todos tus libros" y él me dice " ¿y los aguantaste?", esa clase de comentarios que suele hacer la gente que le dicen que lo admiran, pero bueno, yo también lo haría. Lo más gracioso de toda la jornada fue después que le pedí el autografo, salí saltando del estudio de tv, tal como si hubiera visto a mi actor favorito, para variar en Duoc nadie me entendió, la gente me miraba con cara de: cómo te puede gustar este saco de gueas que se cree no se qué cosa, pero filo yo era feliz y seguía saltando, es re chori andar saltando de contenta, dan hasta ganas de ponerse a bailar. A todo esto también fue a una charla el Matias Bize, medio quebrado salió el flaco, pero bueno, Sábado me gustó, En la cama, aún no la veo, pero me tinca, lo que cae bien de él es su parada de que historias buenas las puedes contar aunque sea con la piche handycam casera y cuando a un comunicador que tiene aspiraciones de gran director (la gran mayoría) les dicen eso, se les incha el pecho y creen de que el mundo puede ser un mejor lugar, por eso mismo hay que puro hacer pelis con la función de camarita que tiene la cámara digital de foto.

Estoy en medio del huracán llamado miles de pruebas para llenar notas que no tenemos, se viene la presentación del proyecto de tele, tengo temor, pero del güeno. Me entrego al camarógrafo sin cabeza, espero que me ilumine con su buen fresnel de dos lucas. Amén.

Y por último bajen de Carol Douglas Doctor´s Order, si alguien alguna vez vió ese capítulo de Sex and the City de los bomberos y vibró con esa canción que Charlotte cantaba ebria como si fuera la última canción de su vida, les encantará; sino bájenla igual, las patitas de elefante y la blusa apretada piden a gritos un sacudón de caderas.